Las picaduras de casi todos los insectos son inocuas, pero algunas pueden ser muy peligrosas e incluso fatales. Sigue estas recomendaciones para ayudar a que tu bebé pase un verano tranquilo, sin molestias ni reacciones alérgicas producidas por mosquitos, avispas, arañas e incluso abejas.La prevención es es la mejor solución.
Para evitar las picaduras fuera de casa
Lo normal ahora que llega el verano es que tu bebé pase mucho tiempo al aire libre así que toma nota:
1. Vístele con colores claros y prendas que cubran sus piernas y brazos.
2. Evita, en la medida de tus posibilidades, los lugares cálidos, muy húmedos o entornos pantanosos (rivera de arroyos y ríos), en donde proliferan los insectos. Si acudes a estos sitios, usa repelentes naturales en aerosol y aleja el carrito de flores, arbustos o madera apilada.
3. Prueba a proteger con mosquiteras de tul el cochecito y su cuna. Otra opción son los mosquiteros de rejilla en las ventanas.
4. Evita la colonia si vas a estar al aire libre y, al contrario, utiliza repelentes de origen natural. Busca cremas de protección solar que no lleven perfume.
5. No tumbes directamente a tu bebé sobre una manta colocada en el césped o hierba. Así evitarás picaduras de hormigas y, peor aun, de pequeñas arañas.
Para evitar las picaduras dentro de casa
Los insecticidas de enchufe son una solución efectiva para evitar los mosquitos durante la noche. No son nocivos en la habitación de los bebés, pero enchufa el difusor una media hora antes de acostar a tu hijo y mantén la ventilación de la habitación. Si va a dormir con las ventanas y puerta cerradas,desenchufa el difusor al acostarlo.
Los repelentes de insectos, aunque puedan ser más eficaces, no debes aplicarlos directamente sobre la piel de tu hijo, ya que incluyen toxinas dañinas para la piel del bebé. Prueba con otros repelentes elaborados con productos naturales derivados de plantas, como la citronella. Aunque su efecto se reduce a 10 minutos no son tan perjudiciales. Otros productos nuevos (que aun se están probando) son: el aceite de soja al 2% o el aceite de eucalipto.
Por último, los aparatos basados en ultrasonidos son ineficaces, así como los brazaletes. Los repelentes en velas sólo funcionan en distancias cortas, por tanto, difundirlos en el ambiente tiene poco efecto.
Qué hacer si a tu bebé le pica una araña o una avispa
Si se trata de una picadura de abeja o avispa:
1º. Extrae el aguijón raspando encima del aguijón (que tiene el aspecto de una astilla) pero nunca tratando de arrancarlo con los dedos ni con pinzas, ya que podrías terminar exprimiendo más veneno hacia la piel.
2º. Lava meticulosamente el sitio de la lesión y el área de alrededor con jabón y agua.
3º. Cubre el sitio de la picadura con hielo (envuelto en un trozo de tela) lo más rápido posible, durante 10 minutos, retíralo otros 10 minutos y repite el proceso. Ayudarás a aliviar el dolor y evitará la hinchazón.
4º. Si el picor es muy intenso, le puedes dar un antihistamínico por vía oral, o aplicarle una crema que contenga corticoide. No apliques barro o saliva.
5º. Observa a tu hijo durante los días siguientes, para asegurarte de que no presenta señales de infección, como aumento del enrojecimiento, hinchazón o dolor.
Aunque las especies de arañas en España suelen ser inofensivas, en principio, si tienes la certeza que tu hijo ha sido picado por una araña, consulta a un médico lo antes posible. Él decidirá si es necesario administrar tratamiento analgésico y antibiótico por vía oral, así como algún antídoto específico.
En esta temprana edad hay que vigilar de cerca las posibles reacciones alérgicas a las picaduras de insectos, que ocurren generalmente en el transcurso de 20 minutos tras la picadura. Recuerda que si tu bebé es alérgico a las picaduras, deberás llevar siempre un botiquín de emergencia, una tarjeta o un brazalete, que advierta a otros de su alergia.
Ana Aznar
Asesora: Dra. Virginia González Ojeda. Jefe del Servicio de Pediatría. Hospital La Zarzuela. Madrid
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