Las primeras palabras del bebé

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Las primeras palabras del bebé son todo un acontecimiento en la familia. Estas primeras palabras se emiten de forma aislada y son aproximaciones fonéticas a las palabras que escuchan de los adultos. Una vez que los bebés consiguen pronunciarlas por primera vez, su cerebro ya es capaz utilizarlas para referirse con intención a algo que quiere o desea.

Las primeras palabras del bebé suelen ir acompañadas también de gestos, ya que debido a su pronunciación incompleta son difíciles de entender incluso para los padres. Poco a poco, a medida que su pronunciación sea más correcta y su estructura lingüística gramaticalmente más perfecta, irá suprimiendo los gestos.

A partir del año y medio de vida, el bebé empieza a pronunciar sus primeras palabras por el deseo de conocer y categorizar el entorno. Estas palabras están vinculadas, en primer lugar, a la frecuencia, pues en general las primeras palabras que dicen los niños son las que más repiten sus padres y, en segundo lugar, al contexto familiar porque están vinculadas a la observación y al recuerdo.

Características de las primeras palabras del bebé

Siguen al balbuceo y se han contabilizado en torno a 50 palabras. Aunque cada niño lleva su ritmo para empezar a hablar, estas 50 primeras palabras comienzan a adquirirse en general alrededor de los 18 meses y presentan unas características particulares:

1.   Se elaboran de forma lenta y asociativa.
2.   Se producen en unos determinados contextos de uso o circunstancias personales, espaciales o temporales.
3.   Están condicionadas por las constricciones anatómicas que impone el aparato fonador del niño.
4.   Cumplen unas funciones comunicativas especiales.
5.   Funcionan como señales en sus inicios y se trata de palabras en las que función y referencialidad van estrechamente unidas.

Las funciones de las primeras palabras de los bebés

Las primeras palabras del bebé surgen de una necesidad del bebé de comunicarse. Las primeras necesidades comunicativas son la negación, la demanda de ayuda, la petición de objetos, la demanda de continuidad o de acciones que le interesan. La necesidad de llamada también es muy importante y por eso, la mayoría de los bebés dicen papá o mamá como primera palabra. Adiós y hola, las siguen en los primeros puestos, y en los niños que no son primogénitos surge pronto la palabra mío para expresar posesión.

1.   Negación, saludo y aceptación. Adiós, no y sí forman parte del léxico infantil en la adquisición de primeras palabras. En la mayoría de los casos conviven durante un tiempo con los gestos.
2.   El gesto de pedir. Es una función comunicativa básica que se verbaliza enseguida. Así, aparece pronto la palabra mira mediante la cual el niño pide atención, la palabra dame para pedir un objeto, la palabra ven para requerir acompañamiento, la palabra ten para ofrecer un objeto y la palabra más para demandar continuación.
3.   Señalar con la mano o con el dedo índice. La intención de llamar a las personas y a los objetos por su nombre también se realiza pronto. Los bebés suelen realizar la primera identificación con el demostrativo este al que suele acompañar el gesto de señalar. También utilizan la palabra yo para identificarse a sí mismo, los términos papá y mamá y tú o el nombre propio de cada uno cuando se refiere a los hermanos.