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Terminan las responsabilidades, las tareas se han completado, las horas de colegio cumplido y las actividades extraescolares se han realizado. ¡A disfrutar del tiempo libre! Pero, ¿qué hacer en estos momentos? Los hobbies y las aficiones tienen la respuesta. No hay nada mejor que encontrar aquello que fascine al niño para que disfrute, mientras aprende cada vez más de lo que le apasiona.
De hecho, es muy importante para los niños tener sus propias aficiones. En lugar de convertir el tiempo libre en horas muertas mirando al infinito o revisando constantemente la pantalla de su móvil esperando una señal de sus amigos. Para conseguir que los hijos encuentren sus hobbies, sólo hace falta motivarlos, y con este fin el centro de Psicología Codex da varios consejos a los padres.
¿Cómo motivar a los niños para que tengan sus 'hobbies'?
Si los hijos no tienen aficiones ni hobbies a través de los que demostrar sus gustos y desarrollarse en este sentido, quizás sólo necesiten algo de motivación. Estos son algunos consejos para ello:
- Hablar con el niño sobre lo que le gusta. Nada mejor para motivar que en primer lugar conocer lo que apasiona a los hijos. Muchos son los gustos, ellos deciden, y una vez conocidos hay que invitarlos a desarrollarlos. Que no sientan vergüenza, es parte de su personalidad.
- Aprovechar fechas señaladas. ¿El niño es un apasionado de la historia? Nada mejor que aprovechar fechas especiales como una exposición temporal de esta temática para llevarlo a esta sala y que dé rienda suelta a su afición. Un primer empujón para que vea lo divertido que puede ser disfrutar de su hobby.
- Interesarse por estos gustos. Quizás la falta de motivación nazca del sentimiento de soledad. Interesarse por estos gustos y compartirlos hará ver a los hijos que tienen unos compañeros a través de los que disfrutar de aquello que le gusta.
- Hacerlo participar en distintas actividades. Hay un gran abanico de posibilidades, es posible que el niño que no haya descubierto lo que le gusta en realidad. Por este motivo, los padres pueden hacer participar a sus hijos en distintas actividades para mostrar estos mundos. Teatros, clases de cocina,
- Interesarse por el desarrollo. La motivación no sólo debe estar presente a la hora de iniciarse en una afición, también hay que mantenerla después. Nada mejor que preguntar a los niños por estos hobbies y sobre qué van aprendiendo sobre ellos. Algo que además fomentará el diálogo entre padres e hijos.
Beneficios de tener aficiones
Motivar a los niños para que tengan aficiones es muy importante ya que gracias a ellas, los hijos conseguirán grandes beneficios:
- Disminuye el estrés. Permanecer entre cuatro paredes sin hacer nada es algo que agobiaría a cualquiera. Gracias a las aficiones este aburrimiento se reduce y no hay lugar para el estrés.
- Descubrimiento de talentos desconocidos. Quizás a través de un hobby un niño por ejemplo descubra un talento para la música, algo que permitirá divertirse al mismo tiempo que desarrolla una habilidad y la mejora. ¿Quién sabe qué se puede descubrir?
- Aumenta la autoestima. Sentirse realizado y participando en aquello que gusta es algo que sube la moral. La felicidad que se sienten en estos momentos llevará al niño a sentirse más seguro en sí mismo que si permaneciera en casa sin hacer nada.
- Mejora de la concentración. Al estar participando en una actividad que les gusta, los hijos pondrán sus sentidos en esta práctica. Algo que además mejorará su capacidad de concentración para el futuro.
Damián Montero
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