Visión infantil, las revisiones ocularesIMG IMAGE

La salud visual de los niños es muy importante de cara a su vida diaria y al rendimiento escolar. Ambos pueden verse seriamente afectados si la visión infantil es deficiente. Los padres debemos tomar conciencia y llevar a los niños al oftalmólogo al menos una vez al año. En visión infantil, las revisiones oculares son aconsejables al menos una vez al año.

Los padres debemos concienciarnos de la necesidad de cuidar y proteger los ojos de los niños con chequeos periódicos. Además, los niños tienen más riesgo de sufrir daños en los ojos provocados por la exposición a los rayos del sol.

Chequeo ocular, una vez al año

En muchas ocasiones, las deficiencias visuales están detrás del hecho de que los niños no rindan en el colegio. Además, los niños, por lo general, no son capaces de transmitir a sus padres que no ven de forma correcta o que están incómodos. A estos niños les cuesta ver la pizarra, escribir o leer, y esto repercute negativamente en su actividad. Para evitar que el problema se agrave y encontrar la solución, los padres deben acudir al especialista para que realice una revisión. Estos chequeos son aconsejables al menos una vez al año.

Además de las incomodidades para realizar las actividades del día a día, los niños que padecen problemas de visión no diagnosticados pueden sufrir baja autoestima. Es posible que se sientan frustrados con más facilidad ya que podrían tener problemas para concentrarse en la lectura, experimentar dolores de cabeza frecuentes e incluso frotarse los ojos de forma constante hasta hacer daño tanto en párpados como en el propio ojo.

¿Cuándo necesitan los niños ir al oculista?

-   Si observamos que se acerca mucho a ver la televisión.
-   Si aprieta los ojos para ver algo lejano.
-   Tiene dolor de cabeza con bastante frecuencia y los ojos cansados.
-   Le cuesta correr y realizar algunos juegos.
-   Se tropieza con frecuencia.
-   Le escuecen y lloran los ojos.
-   La lectura deja de ser una actividad interesante para él y tiene dificultad para leer a distancia.
-   En el caso de los bebés, cuando no siguen la cara de los padres ni la voz. Los ojos se pueden desviar sin motivo.

Los riesgos del sol para los niños

Además de la genética, también influyen mucho los factores externos a la hora de hablar de problemas visuales. Alrededor del 80 por ciento de la exposición a la radiación UV de toda la vida de una persona tiene lugar antes de los 18 años. Los padres, por lo general, tomamos precauciones para proteger del sol la piel de nuestros hijos, pero pocas somos conscientes de la necesidad de tomar medidas para proteger sus ojos de los dañinos rayos y del deslumbramiento.

Los niños tienen más riesgo de sufrir daños en los ojos provocados por la exposición a la radiación ultravioleta que los adultos por diversas razones, entre las que se pueden destacar que la exposición de los ojos de un niño a la radiación UV es de promedio tres veces la de un adulto, o que el cristalino de un niño de menos de 10 años permite que penetre una cantidad de radiación ultravioleta más de 6 veces superior que el ojo de un adulto.

Ante este problema, la revisión anual vuelve a ser necesaria, más aún después de periodos vacacionales en los que hemos estado en la playa o esquiando en la montaña, donde los rayos de sol que rebotan en la nieve pueden ser muy perjudiciales para la vista.

Gafas para los niños

Cuando el problema visual ha sido detectado, la solución pasa por usar unas gafas. Los niños en edad escolar, especialmente los adolescentes, están muy pendientes de su estética, ya no sólo por sí mismos sino también por los comentarios de sus compañeros. Para que un niño no se sienta diferente frente a los demás es importante enseñarle que el uso de gafas le va a ser de gran ayuda y que además, hoy en día hay modelos de lentes que resultan muy favorecedores.

Teresa Pereda

Te puede interesar: 

- 10 consejos para prevenir problemas oculares

- El daltonismo: la visión de los colores puede afectar a tu futura vida laboral

- Atropina, la última solución contra la miopía

- Fatiga visual, una consecuencia del uso de dispositivos electrónicos