Comprender a un animal puede aportar a los niños muchos beneficios y la gestión emocional es una de ellas, porque los perros, desde sus miedos, enseñan a los más pequeños de la casa a comprender los suyos propiosLes ayudan a ser más sociables, a conciliar el sueño con mayor facilidad, fomentan su activad física, incluso les hacen ser más responsables desde edades tempranas. Se habla mucho de los beneficios que tienen los animales en los niños y es que cuando un animal entra en un hogar se convierte en uno más de la familia, pero más aún cuando hay niños por medio, porque el vínculo que se crea entre un niño y su hermano peludo es muy especial. Y justamente es ese vínculo el que les permite a los niños y niñas a entender sus propias emociones porque, de algún modo, crecer entendiendo a los compañeros de cuatro patas favorece su comprensión y ven que sus sentimientos son totalmente válidos. Y así piensa la educadora canina especializada en la educación de cachorros y perros adoptados, y autora del libro 'De perros y sus monstruos', Alena Chvátalová, quien cree firmemente que "la educación canina respetuosa puede ayudar en la educación emocional de los niños y niñas, que es algo que tanta falta nos hace a muchos adultos". Los más de 15 años de experiencia como educadora canina le han enseñado a Alena mucho sobre los humanos, y ser madre le abrió los ojos en cuanto a todo lo que nos queda por aprender sobre cómo nos tratamos a nosotros mismos y a los niños, y para aportar su granito de arena al bienestar de los perros y los más pequeños de la casa comenzó a escribir libros educativos sobre las emociones de estos compañeros de cuatro patas.