Dependiendo de la edad que tengas los pequeños de la casa al decirle adiós a nuestra mascota, deberemos trabajar la pérdida de una forma u otra. Además, será importante que los adultos lloremos delante de nuestros hijos e hijas si así lo sentimosLa relación entre un niño y su mascota puede ser una experiencia muy enriquecedora y beneficiosa para ambas partes. Ambos se convierten en compañeros de juegos a la vez que referentes de seguridad, superación de miedos y desahogo emocional para los niños. Además, se han observado muchos beneficios en el hecho de tener una mascota en todas las edades, desde la compañía emocional que aportan eliminando, por ejemplo, la sensación de soledad, sentirse amados y aceptados, hasta el fomento de la responsabilidad de los niños como cuidadores de sus mascotas. También ayudan con el desarrollo de la empatía y la comprensión, y la reducción del estrés y la ansiedad.Pero, ¿qué pasa cuando esa mascota que ha estado junto a los pequeños de la casa fallece? La terapeuta en acompañamiento de duelos y pérdidas y coach motivacional, Adela Martínez Gómez, asegura que "para el niño será un acontecimiento significativo en su vida debido al vínculo afectivo que se ve roto por la pérdida su mejor amigo. Este evento es una experiencia emocional que tendrá que aprender a gestionar y, como adultos, deberemos enseñarle a hacerlo".Una mascota es más que un animal, y más para los niños. Son considerados amigos y miembros de la familia y por eso su pérdida puede generar una intensa tristeza y dolor emocional, como la pérdida de cualquier ser querido."Es importante que los adultos permitamos a los niños expresar sus emociones de manera saludable alentándolos a hablar de su mascota, compartir recuerdos y escribir o dibujar sobre su pérdida, ya que puede ayudarles", explica Adela Martínez, quien advierte que "dependiendo de las creencias y valores familiares, esto puede ser una oportunidad para abordar temas como la pérdida, la mortalidad y las diferentes formas en que las personas lidian con la muerte".