En la sociedad contemporánea, se espera que las mujeres se adhieran a una serie de normas y expectativas sociales que dictan cómo deben comportarse, interactuar y perseguir sus metas. Una de las manifestaciones más sutiles pero impactantes de estas expectativas es lo que se conoce como el "Síndrome de la Buena Chica". Este fenómeno describe el patrón de comportamiento en el que las mujeres internalizan la necesidad de ser complacientes, sacrificarse y ser perfectas en todos los aspectos de sus vidas, a menudo a costa de su propia salud emocional y bienestar.