Los dispositivos electrónicos, especialmente los teléfonos móviles, se han convertido en la principal puerta de entrada a este tipo de contenido, brindando acceso a una variedad de dispositivos que van desde computadoras hasta tablets y consolas de videojuegos. Esta accesibilidad, combinada con la poderosa influencia de la industria pornográfica, ha creado un escenario donde la exposición involuntaria es más frecuente de lo que podríamos imaginar.En este contexto, el papel crucial del grupo de iguales como fuente de acceso, representando el 51,2% de los casos, revela la importancia de entender cómo el intercambio de material pornográfico se ha integrado en el proceso de socialización, especialmente entre los varones.