El cuento es una narración corta y sencilla acerca de un suceso imaginario que, de forma amena y artística, se expresa en formato escrito u oral. Los cuentos pueden ser relatos fantásticos o aventuras, relatos que hablan del folclore, de tradiciones o de la vida cotidiana.
Como muchos podemos intuir, la tradición oral fue el punto de partida de los cuentos que hoy en día conocemos. En el pasado las narraciones didácticas y las de entretenimiento se transmitían de forma verbal hasta que finalmente se fijaron por escrito.
En general las sociedades de tiempos antiguos eran informadas y recogían relatos cuya función principal era explicar el mundo. Al inicio, el público que atendía estas historias no era infantil: en esta época lo importante era la transmisión de sucesos e historias populares para que no se perdieran en el olvido. Con el paso de los años, las narraciones se transcribieron y se convirtieron en lo que hoy conocemos como cuentos.
La escucha y la lectura de estos cuentos permite a los niños descubrir aspectos e historias importantes referentes a su cultura y aprender y absorber conocimientos sin apenas darse cuenta.
¿Cómo son los cuentos orales en la actualidad?
Los cuentos ayudan a los pequeños de la casa a descubrir el mundo, aprender y a desarrollar su curiosidad y su imaginación. Gracias a ellos se le transmiten valores y aspectos de la cultura que les ayudan a crecer. Pero hoy la tecnología ha cambiado la tradición de la lectura del cuento físico en sí, de la narración oral que realizaban normalmente los papás antes del momento justo de dormir.
Ahora en lugar de decir: mamá o papá ¡cuéntame un cuento!, los niños pueden pedir: ¡ponme un cuento! Es la magia de los audiocuentos, que están grabados y se pueden reproducir en audio en el momento que se desee. Pero, los audiocuentos no suponen solo una actividad personal, se pueden escuchar en grupo, con los hermanos, con los padres... interrumpir la narración y comentarla, y como, escucharlos cuantas veces queramos.
Los audiocuentos se han inspirado en la tradición oral de los cuentos y ha recogido las bondades de ellos como son la entonación, el ritmo, la músico y las voces, con las que los niños pueden imaginar la historia que están oyendo. Así se consigue una conexión emocional con la palabras que se transmiten mediante el tipo de voz, la entonación y la personalidad de los personajes que protagonizan el cuento. Se fomenta que el niño entienda lo que le rodea, además de estimular su creatividad.
Ventajas de los audiocuentos para los niños
Los cuentos ayudan a los niños a desarrollar su vocabulario y a fomentar su curiosidad. Los audiocuentos al igual que los cuentos que son leídos, ayudan a los niños a un mayor desarrollo de su sensibilidad y de su imaginación cuando son contados al no tener imágenes que los pueda representar.
Uno de los mejores momentos para la escucha de estos audiocuentos (aunque no el único), es de antes de irse a la cama ya que los niños se van relajando y se preparan para relajar su mente de cara a llenarla de historias y de sueños que completen su mundo imaginario que va creciendo cada día. Además, este momento es mágico e ideal para compartirlo con sus padres, creando un encuentro de intimidad y de recuerdo para toda su vida.
Maelle Chassard, cofundadora de Stelii
Te puede interesar:
- Audiocuentos: la alternativa a las pantallas para los niños
- Escuchar libros, otra forma diferente de leer
- 15 cuentos infantiles actuales y preciosos para tus hijos
- Cuentos infantiles, ¡cuéntame un cuento!
- Fábulas para niños, el aprendizaje a través de los cuentos
