Actualizado 06/03/2012 07:11

Los nietos adolescentes

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El adolescente necesita abuelos entrañables, que le hagamos sentirse a gusto en nuestra casa. Nuestro afecto le anima y le da seguridad, y para nosotros será un consuelo que nos hace felices.

Para manifestar nuestro afecto y mejorar siempre la comunicación con un nieto, pero en especial si es adolescente, es necesario mostrar interés por sus actividades escolares y deportivas, felicitarle, si es el caso, y animarle si no salió tan bien como esperaba. La seguridad del adolescente mejorará si le elogiamos y le comprendemos todo lo que nos sea posible. Para conocer cómo el nieto adolescente va conformando su personalidad, conviene tener en cuenta un lema: "Escuchar, escuchar, escuchar y alguna vez hablar". Los abuelos podemos cultivar nuestra paciencia aceptando escucharles cuando ellos quieren hablar y estar siempre muy disponibles para escucharles.

Pero, hay que reconocer que en ocasiones es difícil entablar conversación con un adolescente. Ante la pregunta: "¿Qué hiciste hoy?", la respuesta es muy probable que sea: "Nada", pues es celoso de su intimidad y piensa que no seremos capaces de entenderle. Sin embargo, puede iniciarse una conversación con anécdotas de su infancia o de la vida de sus padres a su edad. Hablarle de lo que hemos vivido lo interpretará como una muestra de confianza en su inicial madurez humana. También así podrá valorar los esfuerzos de sus padres para educarle y sacar adelante a la familia. De este modo conocerá y valorará las tradiciones familiares. Por nuestra parte, evitaremos hacernos pesados contando "batallitas nuestras": "Yo a tu edad", o hacerle demasiadas preguntas.

Sin embargo, en otras ocasiones tendrá ganas de hablar y hemos de ser pacientes para escuchar sin interrumpirle y sólo aconsejarle si lo pide. Dialogando con el adolescente le demostramos que le queremos y nos enriquecemos mutuamente, pues nos dará a conocer enfoques de la realidad actual sobre los que, si es conveniente, podremos darle un criterio de valoración moral.

La desobediencia en los adolescentes es algo normal: consecuencia del deseo de afirmación de su yo. Es negativo para resolver estas situaciones el enfrentamiento directo, que suele ir unido a la amenaza de un castigo. Los abuelos ante la posible falta de respeto de un nieto adolescente, hemos de buscar el momento mejor para escucharle y que nos exponga la causa de su rebelión. Hay que estar siempre abiertos al diálogo y tratarle con paciencia.

Las confidencias del nieto adolescente

Los abuelos tenemos que "hilar fino" y no dejarnos enredar por las razones de un adolescente, que trata de demostrarnos que sus padres no tienen razón en algún aspecto que le exigen. Conviene, eso sí, escuchar sus quejas sobre el comportamiento de sus padres con él, para luego dialogar y tratar de que comprenda las razones de sus padres. Que no juzgue sólo en blanco o negro: mostrarle los matices de cada situación. Nunca desautorizaremos a sus padres. Con respecto a lo anterior, sin embargo, hay que saber mantener en secreto las confidencias de nuestro nieto adolescente. Pero, a la vez, y para algunos temas, si estimamos que necesita la ayuda de sus padres, hay que convencer al nieto para que sea valiente y se anime a contarles el asunto.