El TDAH no es excusa para hacer amigos. - ISTOCK
Lo que es diferente siempre provoca algo de miedo. Salirse de la zona de confort y conocer algo distinto cuesta mucho y por ello cuando un niño no se ajusta al canon normal, puede verse rechazado por el resto de sus compañeros. Un ejemplo son los menores con Trastorno de Déficit de Atención, TDAH, que pueden encontrarse con problemas a la hora de hacer amistades y afianzarlas.
No solo porque ser distintos provoque el rechazo de los demás, sino por los problemas propios del TDAH. Por ello, el Mark Griffin, fundador y director de Eagle Hill School, escuela para niños con discapacidades de aprendizaje específicas, explica algunas nociones básicas para los padres de hijos con estos trastornos. Unos tips con los que pretende favorecer el desarrollo social de estos menores.
Dificultades del TDAH
Un niño con TDAH presenta dificultades para hacer amistades ya que estos menores pueden carecer de autocontrol y ser extremadamente activos. Estos pequeños pueden causar un cansancio en sus interlocutores al hablar mucho y decir cosas sin pensar. Al mismo tiempo también pueden provocar el enfado de sus compañeros al no prestar atención a lo que las otras personas están diciendo y por ejemplo no enterarse de las normas de un juego y hacerlo mal.
Además estos alumnos tienen más probabilidades de:
- No ser aceptados con facilidad por sus compañeros
- Estar socialmente dejados de lado por sus maestros y compañeros de clase
- Ser vistos por sus maestros como carentes de destrezas sociales
- No ser elegidos para obras de teatro de la escuela o para unirse a actividades grupales
- Estar más dispuestos a ceder a la presión que sus compañeros le impongan
Sin embargo estas dificultades no quieren decir que no puedan tener amigos. Simplemente que los niños con TDAH precisan más tiempo de adaptación en este sentido y un apoyo por parte de padres y educadores. De esta forma se contribuirá a que su autoestima se mantenga y además aprenda a lidiar con los problemas relacionados con este trastorno.
Ayudar al niño con TDAH
El primer paso para ayudar a un hijo con TDAH es hablar con los profesores de los niños. Los docentes pasan muchas horas junto a los menores en un entorno social como es el colegio, en donde el pequeño con este trastorno se relaciona con otros compañeros. Por ello pueden encontrar las maneras de poner crear grupos en donde este alumno se sienta integrado, además de explicar al resto que este es uno más y alguien con quien divertirse si se le da la oportunidad.
En el hogar los padres del niño con TDAH pueden trabajar por cambiar el comportamiento de estos hijos para enseñarles a mantener la calma y poder mantener la atención en los momentos de juego con sus compañeros. También pueden animar a los niños a crear eventos sociales como meriendas en casa o salidas al cine con sus compañeros.
Los padres también tienen que enseñar a sus hijos a manejarse con sus emociones y los sentimientos que les provoque el hecho de verse sin amigos. Animar a que los hijos hablen de estos temas servirá para reforzar la confianza de los niños y animarlos a buscar nuevas amistades, a no rendirse por sentirse diferentes.
Damián Montero
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