El desarrollo de las emociones en los niños
ISTOCK

Las emociones en los niños surgen de manera progresiva a medida que van creciendo, están programadas de forma biológica. Así, poco a poco se va produciendo el desarrollo cognitivo y el niño toma conciencia de sus propias emociones y de las emociones de los demás. Cuando llegan a los 4 años, los niños se dan cuenta de que las personas sienten cosas distintas a las que siente él, empiezan a empatizar con el otro.

En las emociones de los niños, la autoestima juega un papel fundamental. Dependiendo de cómo esta se desarrolle, el niño tendrá unos sentimientos u otros, como el orgullo, la ilusión etc. Como instrumento regulador de los grandes sentimientos esta la vergüenza. Poco a poco el niño va tomando conciencia de que sus emociones y sus actuaciones deben tener ciertos límites en algunas ocasiones, y para ello, la vergüenza es el principal sentimiento represor.

La etapa de la regulación emocional de los niños

La etapa, que comprende de los 2 a los 6 años, es aquella en la que los niños empiezan a ser capaces de aumentar, dirigir y controlar sus emociones. La regulación emocional es algo fundamental para las distintas áreas de la vida de las personas, de ahí que cuando los niños adquieren esta edad, es necesario que los padres sepan educarlos emocionalmente.

Artículo relacionado:
- La soledad emocional, un riesgo en la adolescencia

El desarrollo emocional parte del sistema límbico, que es el encargado de controlar las emociones. Este sistema es muy sensible a las expresiones faciales, así cuando los niños sienten miedo es muy fácil que se les refleje en el rostro. Los niños sentirán en la medida en que se les eduque, por ejemplo si se les enseña que montar en bici es peligroso, sentirán miedo cuando tengan que coger una bicicleta.

Poco a poco, las personas cuando vamos creciendo somos más capaces de controlar esas emociones que empiezan a aflorar cuando somos pequeños y que poco a poco vamos aprendiendo a domar, aunque siempre habrá que tener en cuenta las diferencias intersubjetivas, pues no hay ninguna persona igual a otra.

Consejos para favorecer el desarrollo emocional de los niños

Los niños mejoran su desarrollo emocional según las relaciones personales que vayan manteniendo, y estas son principalmente con sus padres y familiares. Es muy importante cómo actúen los mayores frente a los niños, pues estos aprenden de los que se les dice, pero también de lo que ven, por ello es imprescindible comportarse de manera adecuada frente a ellos.

Observar qué estamos diciendo con nuestros gestos, palabras y acciones, contactar con el estado emocional de los niños, escuchar qué nos están diciendo, respetar sus propios ritmos de actuación e intentar ponerse en su lugar son algunas de las técnicas que los adultos deben seguir para ayudar a los niños en su desarrollo emocional.

Los cambios emocionales de los niños y su educación requieren gran esfuerzo, por eso es importante tener en cuenta que a veces tendrán algunas conductas desajustadas, debido a que no han aprendido todavía a controlar sus emociones, como por ejemplo las rabietas. En estos casos es bueno ayudarles a reflexionar sobre sus sentimientos ante estas conductas, motivarle para que pruebe otras formas de relacionarse y explicarles cuáles son las consecuencias de estos comportamientos inadecuados.

A medida que los niños van esforzándose, es bueno valorar sus intentos para que sepan que están actuando de forma correcta. Cuando presenten alguna conducta desordenada, producto de emociones descontroladas, es bueno corregirle pero sin usar términos como “siempre” o “nunca”, puesto que se elimina la posibilidad de que el niño pueda recordar por sí mismo las situaciones en las que actuó de otra manera.

Ana Vázquez Recio

Te puede interesar:

- Cómo vencer la timidez: consejos para niños tímidos

- La importancia de la amistad en la niñez

- El mejor amigo en la infancia