Así es el aprendizaje vivencial, a través del que tus hijos descubren el mundo interactuando con él. - ISTOCK
¿Cómo aprende un niño? Esta es una de las preguntas que más se hacen los padres. Y la respuesta es que no todos lo hacen al mismo ritmo ni de la misma manera. Existen muchas fórmulas para inculcar valores, conocimientos, o simplemente para que los más pequeños empiecen a descubrir su mundo. Y, una de las mejores herramientas para estas finalidades es la experiencia.
Nada enseña más que la propia vivencia. Esta es la base del aprendizaje vivencial, tal y como indican desde la Organización Mundial de la Salud, OMS. De esta forma, los niños se enfrentan a 4 fases a través de las que van interiorizando conocimientos: actividad, análisis, conceptualización y conexión. De esta forma, se pueden encontrar varios beneficios para el desarrollo del niño.
Fase 1: actividad
Esta fase plantea el desarrollo de una actividad como el inicio del proceso de aprendizaje. Es el momento del hacer y tiene como objetivo llevar al niño a una experiencia posibilitadora que le dote de una enseñanza específica según las intenciones de los educadores. Pueden emplearse varias técnicas, como juegos, dramatización, ejercicios verbales y no verbales, simulación comportamental, procesos decisorios, etc.
Esta fase destaca por su gran energía emocional, puesto que cada participante expone libremente sentimientos, ideas y opiniones. El niño forma de un grupo, a través de sus miembros, podrá involucrarse y mostrar apertura de diversas formas: exponiéndose, siendo espontáneo, auténtico, intercambiando opiniones. En este caso será posible elaborar un proceso de diagnóstico de la situación vivenciada.
Fase 2: análisis
Esta fase es el momento del proceso de diagnóstico por parte del niño y en ella expresa lo que vivió, lo que percibió siendo estimulado, contenido y escuchado por el facilitador. Es el relato de la situación de la que ha sido testigo. Aquí el "cómo" es más importante que el "qué".
Los padres deben participar como oyentes y analistas, dando un cierre y enriqueciendo lo que los más pequeños aprendieron.
Fase 3: conceptualización
Una vez el niño ha procesado la vivencia y es consciente de lo que ha podido aprender a través de la misma, es el momento de que sea consciente de estas experiencias y organizar un mapa conceptual de todo ello. Aquí se incluyen informaciones y fundamentos teóricos referentes a las informaciones de los participantes, las informaciones relativas al contenido teórico y perceptivo, y de los facilitadores de contenido. Es una etapa importante en el proceso de aprendizaje: organiza la experiencia y busca la comprensión de su significado.
Fase 4: conexión
Una vez realizado el procesamiento, donde el facilitador organizó el pensamiento del grupo, tornando consciente lo que fue vivido y dicho (momento de concientización), se construye el Mapa Cognitivo.
Aquí se incluyen informaciones y fundamentos teóricos referentes a las informaciones de los participantes, las informaciones relativas al contenido teórico y perceptivo, y de los facilitadores de contenido. Es una etapa importante en el proceso de aprendizaje: organiza la experiencia y busca la comprensión de su significado.
Damián Montero
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