El impacto de las redes sociales en los niños y adolescentes resulta hoy día preocupante. A pesar de que tanto padres, como las empresas, tratan de limitar las edades de uso de este tipo de aplicaciones, la realidad, es que los menores de hoy bucean como peces en el agua en las aplicaciones tecnológicas y navegan sin control en las
redes sociales.