Actualizado 03/09/2014 13:11

Las niñas son más propensas a los piojos

Los piojos en las niñas
Foto: THINKSTOCK Ampliar foto

Los piojos son unos insectos sin alas, por lo que se van pasando de una cabeza a otra por contacto directo. Viven en el cuero cabelludo de las personas, y especialmente en el de los niños y jóvenes.  Cualquier niño puede albergar piojos independientemente de su nivel de higiene, por lo que, no debe de ser un motivo de miedo o de vergüenza para los pequeños.

Aunque no son transmisores de enfermedades, que tomen como residencia nuestra cabeza es desagradable y produce picor. Es muy probable que los niños tengan piojos en un momento u otro de su infancia. El periodo más habitual es entre los tres y los once años de edad y en el caso de las niñas, estas son más propensas a padecerlos. Aunque la razón no está aún clara. Parece ser que es debido a la longitud del cabello, según explica el jefe de la Unidad de Pediatría Social del Hospital Infantil Universitario Niño Jesús, el doctor Jesús García Pérez.

Los piojos son insectos entre 2 y 3 milímetros de color marrón grisáceo, les gusta habitar en nuestro cuero cabelludo y se alimentan de nuestra sangre y es su saliva la que nos provoca el picor en la cabeza.

Aparecen durante todo el año, pero sí que en mayor cantidad de contagios durante los periodos de altas temperaturas y al comienzo del curso escolar.

Consejos para eliminar los piojos en los niños

- Los piojos nacen de las llamadas liendres, de las que el parásito puede poner entre 50 y 500, suelen albergarse en la raíz del pelo y las suelen poner en las zonas de mayor sudoración. Por ello, a la hora de buscar piojos es importante centrarnos detrás de las orejas o en la zona occipital.

- Existen en la actualidad lociones en forma de champú para erradicar los piojos. Lo primero que hay que hacer es aplicar la loción con un suave masaje y tapar la cabeza durante unos 10 o 15 minutos para lograr intoxicar al piojo. El gorro ayuda a la absorción del champú para matar el bicho y luego protege del posible contagio a otros niños.

- Cepillar el pelo, por último hay que cepillar con una lendrera, es un cepillo especial con las púas muy juntas, permite arrastras los piojos y las liendres muertas.

- Pasada la semana debemos de comprobar si el tratamiento ha funcionado, en el caso contrario, debemos de aplicar mismo método hasta que desaparezcan

- También podemos usar el remedio casero por antonomasia contra los pijos: el vinagre. Utilizado por nuestras abuelas y madres, no es un tópico que el vinagre, en su justa medida, ayude al desprendimiento de la liendre.