Leer a los bebés tiene grandes beneficios, aunque en un primer momento pueda parecer lo contrario. - ISTOCK
¿Entiende el bebé cuando se le habla? Es más, ¿puede llegar a comprender cuando sus padres les leen? La respuesta es no, ya que no dominan el lenguaje más allá del idioma no verbal. Pero esto no quiere decir que esta rutina literaria no tenga beneficios para estos pequeños y en edades tempranas. De hecho, así lo destacan desde la Fundación Nemours.
Los profesionales de este centro aseguran que leer en voz alta a los hijos es una actividad que merece la pena compartir con ellos durante sus primeros años. Y es que estamos ante uno de los estímulos mas importantes en su desarrollo y que, a la larga y a medida que adquiera nuevas destrezas, se comenzarán a apreciar los beneficios de esta actividad.
Beneficios de leer a un bebé
La lectura en voz alta a un bebé les asegura:
- Les ayuda a comunicarse, al familiarizarse con el idioma que en el futuro aprenderá.
- Introduce al bebé conceptos como números, letras, colores y formas de una manera divertida.
- El bebé desarrolla su capacidad auditiva, memoria y empieza a adquirir el vocabulario que más adelante usará.
- Los padres que leen a sus hijos les da información sobre todo el mundo que los rodea.
Aunque pueda parecer mentira, cuando un bebé cumple el primer año de vida ya han aprendido los sonidos que se necesitan para hablar un idioma. A más historias se les haya leído a los más pequeños, mayor exposición a las palabras tendrá y mayor facilidad tendrá para dominar la lengua que sus padres le están enseñando al potenciarse las redes del cerebro.
Lectura por etapas
El desarrollo de un bebé es un proceso constante, pero con diferentes etapas. Esto ha de tenerse en cuenta a la hora de elegir el tipo de lectura para los hijos:
- Entre los 4 y los 6 meses los padres pueden advertir que su el bebé demuestra más interés en los libros como artículo físico. El niño intentará agarrar los volúmenes con sus manos pero también lo querrá morder, chupar y tirar. Por eso se recomienda apostar por obras de plástico o de tela que tengan colores vivos y texto repetido o que rime.
- Entre los 6 y los 12 meses, los bebés ya pueden entender que los dibujos representan objetos reales, y es muy probable que demuestre preferencias por ciertas páginas o hasta historias. Los niños reaccionarán mientras los padres leen, tratando de agarrar el título y emitiendo sonidos. Al cumplir los 12 meses será capaz de pasar las hojas, con ayuda de un adulto, señalar objetos en la página y repetir sus sonidos.
Damián Montero
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