MADRID, 18 Septiembre Para resolver temas puntuales como cambiar al bebé de habitación, hacer que deje el chupete, ayudar a que se integre en la guardería o en el cole, acabar con sus dificultades de aprendizaje, o enseñarle a adquirir ciertos hábitos. El coaching familiar es una gran alternativa para solucionar de manera sencilla aquellos conflictos que surgen en determinadas edades de los niños y que se arrastran durante largos períodos de tiempo. La falta de comunicación entre los miembros de una misma familia, las dificultades para adaptarse a situaciones económicas diferentes causadas por la pérdida del empleo de uno de los miembros y sus posibles consecuencias son algunas de las situaciones que hacen que las familias se vean en la necesidad de pedir ayuda a especialistas para que les ayuden a superar sus problemas. "Hay también algunos casos de falta de entendimiento en parejas y algunas situaciones de personas que sufren soledad porque son extranjeras en período de integración", apunta Beatriz.
