¿Te sorprenden los resultados de las evaluaciones? - ISTOCK
El día de entrega de los boletines de notas es uno de los acontecimientos esperados con más impaciencia por muchos estudiantes. Su interés, con frecuencia, guarda relación con la valoración que dan los padres a esta información del colegio. El grado de sorpresa, para los padres, depende del seguimiento diario de la marcha colegial y, en el caso de alumnos mayores, de la sinceridad de estos a la hora de transmitir el día a día.
Los resultados escolares dan pie a muchos planes de acción hasta la siguiente información del colegio. Como la información que ofrecen los colegios generalmente coincide con las evaluaciones, convendrá ajustar el tiempo de cada plan a este periodo; sin embargo, deberán hacerse planes intermedios renovando las metas y la motivación con la frecuencia que sea necesaria.
Cuatro preguntas sobre los boletines de notas
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1. ¿Qué información debe contener un boletín de notas?
Sin duda, de una manera o de otra, el boletín de notas debe reflejar las calificaciones académicas de áreas o asignaturas así como toda la información que, por ser de valor para los padres, puede reflejarse en un boletín: puntualidad, conducta, compañerismo, laboriosidad, etc.
2. ¿Cómo ha de ser el boletín de notas?
Veraz, completa, puntual, clara. No por contener más información un boletín de notas es mejor. Un exceso de datos, reflejados de modo confuso, conduce únicamente a una peor comunicación. Un informe del colegio debe reflejar del mejor modo posible la situación actual del alumno. Esta información debe reflejar todas las facetas evaluables y debe enviarse a tiempo para que puedan ponerse los medios oportunos para mejorar los siguientes resultados.
3. ¿Esperabas ese informe?
En circunstancias ordinarias la respuesta debe ser siempre sí. Un informe es el resultado de un periodo de trabajo, incluso en el caso de que las calificaciones se hayan puesto por los resultados de unos exámenes recientes.
4. ¿Lo esperaba tu hijo?
De un modo adecuado a su edad hay que ayudarle a que se conozca a sí mismo. En una misma aula hay chicos que predicen sus resultados con una precisión casi matemática y otros para quienes su opinión no guarda ningún sentido con la realidad. Cuando uno conoce la causa puede predecir el efecto y tomar las medidas oportunas. Vale la pena que a los pocos días de la llegada de las calificaciones, el padre, la madre o los dos tengan una conversación con el hijo o la hija. En esa conversación, permeable a los nuevos datos por ambas partes, se debe comentar lo más significativo del informe y quizá anotar al dorso las metas contempladas hasta el siguiente boletín de notas.
José Manuel Mañu. Director de Formación del Colegio Gaztelueta
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