El embarazo en tiempos de pandemia - ISTOCK
La pandemia ha afectado a todos y cada uno de los aspectos de nuestras vidas. Uno de ellos ha sido la planificación familiar, ya que la decisión de tener un bebé se ha visto condicionada por la irrupción de la Covid-19 en nuestra sociedad.
De hecho, muchos padres no están dispuestos a tener un hijo/a mientras sigan los confinamientos, las restricciones y los contagios o bien, tienen miedo a que el bebé se contagie. La propia pandemia y los efectos sobre la salud individual de cada persona, y también la inseguridad laboral y económica, son probablemente las principales causas del descenso de la natalidad no solo en nuestro país, sino en todo el mundo.
Sin embargo, los riesgos de que el embarazo se complique por las circunstancias de la pandemia son muy bajos. Es más, tener un hijo en época de pandemia puede aportar, incluso, algunas ventajas.
¿Por qué es una buena época para concebir?
Pese a que muchos padres se muestran reacios a tener un bebé por el miedo al virus, la realidad es que concebir en tiempos de pandemia también puede tener sus ventajas.
Tener un hijo en tiempos de pandemia puede dar la oportunidad aprovechar el teletrabajo, los confinamientos y las restricciones pasar más tiempo en familia. Estar en casa, además, no protege únicamente a la madre y al bebé de evitar el contagio por Covid-19, sino también el contagio por otras enfermedades.
Para aquellos padres que estén buscando tener un bebé y aumentar la familia, la situación actual puede dar a las parejas más oportunidades para concebir, ya que tienen más oportunidades de coincidir en casa.
Con el bebé en casa
La pandemia también trae consigo situaciones favorables que pueden simplicar el proceso inicial de crianza de tu hijo/a. Uno de ellos puede ser cumplir el periodo de lactancia de seis meses que recomienda la OMS, gracias a los beneficios del teletrabajo al incorporarte tras tu baja maternal.
Por otra parte, a la hora de conciliar, podrás pasar más horas con tu bebé y no tendrás la necesidad de ampliar horarios de escuela infantil o guardería, o en su caso cuidadora, para cubrir el tiempo de trabajo fuera de casa.
Por último, la salud de tu bebé también saldrá beneficiada, ya que durante el primer año su sistema inmunológico se está fortaleciendo y así ganará tiempo antes de entrar en contacto con los virus propios de escuelas infantiles que causan rinitis, tos y afecciones intestinales.
Marina Berrio
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