Hay que conseguir que los niños vayan cómodos en su bicicleta. A cada edad (talla corporal), le corresponde un tamaño concreto: es muy habitual ver familias en las que se le compra una bicicleta "para cuando crezca", sin tener en cuenta que cuando crezca, esas bicis ya no estarán de moda y querrá otro modelo (y se lo compraremos...) o se olvidará de su bicicleta, comprobando que no se encuentra cómodo.