La caligrafía es una buena elección para estimular a los niños.
ISTOCK

Con tantas pantallas y tantos teclados en ocasiones se nos olvida que también podemos escribir a mano usando lápices o bolígrafos. La caligrafía a mano no solo es una habilidad que merece la pena dominar por su utilidad, sino que además cuenta con numerosos beneficios tanto a nivel intelectual como en el aparato motor. Unos resultados que se están perdiendo ante la expansión de las nuevas tecnologías.

Por ello, conviene recordar estos beneficios de la caligrafía como actividad en los más pequeños. Una práctica con la que desarrollar ciertas capacidades en el niño y de las que da cuenta la maestra de Educación Infantil Noelia Martínez Fernández en uno de sus trabajos. Una buena prueba para que los padres apuesten por este método en la crianza de sus hijos y que es perfectamente compatible con el uso de las nuevas tecnologías.

Desarrollo motor y mental: los beneficios de la caligrafía

Como se ha dicho, la caligrafía aporta al niño tanto habilidades físicas, en el aparato motor, como a nivel intelectual. Estas son varias de ellas:

- Refuerzo de la psicomotricidad fina. Mantener el pulso, realizar trazos empleando lápices, todo ello ayuda a que la motricidad mejore y además se potencie la conexión cerebro-extremidades superiores.

- Mejora de la memoria. Son muchas las letras, símbolos y otros aspectos que hay que tener en la memoria, al igual que sus trazados.

- Mejora del nivel de lectura al reconocer con mayor facilidad letras y símbolos que componen los textos.

- No es incompatible con el uso de las nuevas tecnologías. De hecho la caligrafía contribuye a una mejor redacción de correos y textos mecanografiados ya que en papel se cometen menos faltas de ortografía, algo que se traduce en la escritura digital.

- Favorece la concentración. Aunque los niños no se den cuenta, al escribir deben prestar su atención en el papel y en el trazo a realizar, por lo que su capacidad de concentración se potencia durante estos momentos. Un buen ejercicio para potenciar esta habilidad.

Consejos para favorecer la caligrafía

Una vez que se han visto los beneficios de la caligrafía en niños toca preguntarse, ¿cómo potenciar esta habilidad en los mismos? Estos son algunos consejos para conseguir hacerlo de forma correcta:

- La postura del niño. La espalda tiene que estar recta y ligeramente inclinada hacia adelante. La cabeza alineada con el cuerpo (ni torcida, ni apoyada en la mesa). Para escribr a mano, los antebrazos deben reposar sobre la mesa formando un ángulo recto. El antebrazo de la mano dominante debe estar dentro del papel y la mano debe ir por debajo de la línea de escritura. Hay que prestar especial cuidado en el caso de los zurdos, que tienden a pasar la mano por encima del renglón en el que están escribiendo. La mano no dominante debe sujetar el papel. Los pies, apoyados en el suelo. Si no llega puede utilizar un reposapiés. Las piernas deben formar un ángulo recto con el cuerpo.

- La sujeción del lápiz. El lápiz se sujeta con los dedos pulgar e índice semiflexionados, a una distancia aproximada de dos centímetros de la punta, y se apoya en el dedo corazón. Es necesario no ejercer una presión excesiva con los dedos, porque se pierde en precisión y en velocidad, y se aumenta el cansancio de la mano.

- La posición del papel. A la hora de colocar el papel debemos diferenciar entre zurdos y diestros. Para los diestros colocaremos el papel en el lado derecho de la mesa y ligeramente inclinado hacia la izquierda. Los zurdos lo colocarán en lado izquierdo, inclinándolo hacia la derecha.

Damián Montero

Te puede interesar:

Escribir a mano facilita la memorización y el aprendizaje

- Aprender a escribir, ejercicios para niños

- Cómo enseñar a los niños a expresarse por escrito

- Cómo mejorar el rendimiento escolar de los niños